PHILODENDRON VERRUCOSUM

El Verrucosum no es de los que aceptan cualquier condición sin quejarse. No se va a secar en silencio ni va a fingir que todo está bien si lo descuidas. Si le falta humedad, se pone nostálgico. Si lo riegas de más, te lo hará saber con hojas caídas, como quien pierde la fe en la humanidad. Y si le das lo que necesita, bueno… se pone espectacular. No porque quiera impresionar, sino porque simplemente es así.

Notas de cuidado:

Riego: Moderado. Si la tierra sigue húmeda y aún así le das agua, esperará a que te des cuenta de tu error… con cara de decepción.
Luz: Indirecta brillante. No lo pongas al sol directo, que él no firmó para eso.
Extras: Ama la humedad. No es capricho, es necesidad. Si el aire está seco, se va a notar en su actitud (y en sus hojas).
Este philodendron es como ese amigo que es brutalmente honesto: si haces las cosas bien, lo notarás. Si no, también. No es de los que se conforman con menos de lo que merecen, pero oye, al menos siempre sabrás en qué estás fallando. 🌿😏